En 1994 compré este carro habiéndome bajado de una Cherokee Renegade que terminé vendiendo ante la inclemente insistencia de alguien que se enamoró de ella. Y buscando un carro para reemplazarla me apareció esta belleza, que me enamoró a primera vista. No tuve otra opción que comprarlo. De ahí en adelante ha sido "mi carro" y del cuál no querré salir de él nunca. Ahora, no tenía ningún conocimiento de la marca, salvo lo que el común de la gente conoce. Sin embargo, la delicia de desempeño, el confort y el equipo que tiene el carro es tan agradable que empecé a querer sentirlo como nuevo. No fui enamorado de la marca, no fui fan de los antiguos, no fui ni restaurador ni tenía contacto con el gremio. Fue solo un gran aprecio ante un carro que llenaba todas mis expectativas en el uso diario.







Afortunadamente el carro por tratarse de un post - post (fabricado en nov. de 1982) ya venía con muchos gadgets de los E30s por lo que venía de fabrica con lavafaros, techo, y recuesta cabezas en las sillas traseras. Además, el dueño anterior le había puesto los logos "M" tanto en la parrilla delantera derecha, como al lado del anagrama de 320 y además el spoiler de baúl original del E30. Detalles que me enamoraron del carro cuando lo compré, desconociendo “la originalidad” de BMW. Lo mismo que el radio Blaupunkt extraíble, que tiempo después supe que esos venían desde 1984 por lo que no podía ser original en mi 82. Algo parecido me ocurrió con los emblemas "M" cuando supe lo que querían decir y la falacia que implica usarlos. Sin embargo, sé, que para el común de la gente los colores M son parte integral de la marca. Cuando tuve que mandar a hacer los sobre tapetes los mandé a hacer con los logos M, lo mismo que el timón sport (Que también lo traía) al que la costura interior del cuero se la mandé a hacer con esos colores. Me encantaba (Y aun me encanta) esa combinación del color del carro con los colores M. El caso fue que entré en el mundo de la restauración (O conservación) y lo que eso implica, sin proponérmelo. Y así seguí durante mucho tiempo. Desde el principio el sitio para reparaciones fue Rionegro y repuestos donde Jairo Duarte y Don Misael en la Castellana. Hoy en día sigo reparando en la L. En repuestos si ha habido cambio porque desde hace rato compro en Walloth & Nesh, mucha cosa. Lo que no se consigue aquí.
El “Break point” ocurrió cuando ingresé al BMW Club Clásicos Colombia. Pues gracias a la increíble generosidad y calidez de sus miembros ya dentro de él empecé a “conocer” de BMW y ahí si me enamoró la marca y más mi carro. Es así, como hoy en día sé de BMW, sé de el E21 y hasta me volví ducho en E12. El final -si es que lo hay- es tener los dos carros con sus placas azules. Y no tanto por ellas en sí, sino porque los carros cuando las tengan es porque ya los puedo parquear al lado de varios que conozco y que no queden como mosco en leche. Agradeceré todos los comentarios y las criticas (buenas y malas) en su totalidad. En este Club he aprendido montones, pero sé también lo mucho que me falta. Eso hace que mi agradecimiento con el Club sea inmenso y no menciono nombres porque la lista sería grandísima. A todos muchísimas gracias. Queda a sus órdenes. No llevo sino 27 años disfrutando este carrito.



